Licenciatura en Contaduría Pública

Formar profesionistas de la Contaduría Pública de gran calidad, con una clara conciencia de responsabilidad y servicio en su ejercicio profesional, logradas con una fuerte dosis de actividades docentes y de investigación, enfocada al logro de la mejora continua a través de la utilización de herramientas tecnológicas, con valores éticos y morales aplicados en el entorno social.

El egresado de la Licenciatura en Contaduría Pública es un profesional que desarrolla, establece y logra soluciones integrales que benefician y contribuyen a la sociedad, que impulsan y sirven como soporte al desarrollo de las empresas de los ámbitos estatal, regional y nacional.

Se distinguirá por las siguientes capacidades:
Conocimientos
Poseer una amplia conciencia de participación social a través de empresas socialmente responsables.
Identificar el marco conceptual de su profesión en sus aspectos económicos, financieros, jurídicos y políticos.
Interpretar los fenómenos económico-financieros ocurridos a nivel mundial.
Identificar los preceptos de la ética profesional en el ejercicio de su actividad.
Diseñar sistemas de contabilidad electrónica para generar información financiera, su debido control y toma de decisiones.
Habilidades

Dirigir la operación de sistemas informáticos financieros en cualquier tipo de entidad.
Analizar e interpretar la información financiera conforme a las normas emitidas por el gremio y por las autoridades correspondientes.
Estructurar la planeación financiera y controlar su ejecución en la puesta en marcha de proyectos de inversión.
Dictaminar información financiera útil, veraz y confiable para los tomadores de decisiones.
Contador público
Auditor
Coordinador de finanzas
Ejecutivo de cuentas contables
Analista de inversión
Consultor de transacciones financieras
Especialista en sistema tributario
Agente bursátil
Contador fiscal
Consultor financiero y bursátil

Ser hábil para las operaciones numéricas, tener inquietud por adquirir una visión integral de los negocios e interés por las funciones administrativas; tener capacidad de análisis y síntesis, poseer un espíritu de colaboración y vocación para orientar a las personas a través de fundamentos lógicos con un alto grado de compromiso.