Maestría en Psicoanálisis Humanista

Obtener un profundo conocimiento de las principales teorías psicoanalíticas y humanistas para contar con un completo equipamiento teórico desde el cual acompañar a la persona como un co-constructor de su realidad en vez de verlo como un objeto de estudio plagado de carencias y psicopatologías.

Esta Maestría en Psicoanálisis Humanista está dirigida a cualquier profesional que cuente con un perfil marcadamente empático, comprensivo y humano, que sea capaz de aceptar las propuestas de la realidad desde lo que son en vez de desde lo que crea que debería ser. Cualquier tendencia o facilidad para emitir juicios o justificaciones aleja al terapeuta de su interlocutor; situación poco deseable en una profesión destinada a acompañar a la persona hacia una nueva realidad de bienestar.

Las características del enfoque de esta Maestría en Psicoanálisis Humanista exigen que el futuro psicoterapeuta tenga un profundo conocimiento de sí mismo, que sea flexible y pueda vivir sin la necesidad de emitir juicios, ya que se busca que el paciente pueda animarse a ser quien realmente es.

Su enfoque y el que incorpora una visión diferenciada de la realidad de cada individuo.
Siendo creadores de OntoPsiquis, teoría psicodinámico-humanista de los tipos de personalidad, formamos a nuestros alumnos desde un estudio crítico comprendiendo cuáles fueron las necesidades y motivaciones posibles de cada creador de una escuela o corriente psicológica o psicoanalítica.
Al momento no existe otro estudio que logre integrar congruentemente las corrientes del psicoanálisis y del humanismo, pudiéndole dar al individuo una efectiva visión objetiva de su realidad y técnicas para superar sus conflictos.

Se accede a un proceso de selección.
Dado que los requisitos de índole sensible y humana son indispensables, este proceso de selección es una forma de cuidar al futuro alumno de tener que ubicarse en un ámbito de confrontación con su propia realidad.

La Asociación de Psicoanálisis Humanista SC.
El plan de estudios es muy completo y el estilo de dictado como seminarios exige cumplir con las lecturas y con la exposición del nivel de comprensión de cada tema.
Los primeros dos semestres son netamente teóricos, formativos, en tanto que los últimos dos semestres incorporan la práctica con pacientes bajo supervisión estricta de nuestra parte en una clara situación de preparación para la actividad como psicoterapeutas al término de la formación.
En ambas etapas, la teórica y la teórico-práctica, se buscará la flexibilización de las estructuras que pudieran estar rigidizadas por posibles temores o inseguridades propias de quienes aprenden para formarse.
Al final del camino, esta Asociación avala responsablemente que cada psicoterapeuta está capacitado para trabajar con pacientes o desarrollarse en el ámbito académico.